Justo el día mas especial para todos los niños, obvio contándome...Desperté por la mañana y vi que en mi sala sin árbol de navidad (a falta de presupuesto y ganas) no habían llegados ningunos reyes magos a dejarme algún juguete nuevo. Miré por la ventana y vi que ya estaba amaneciendo, la ansiedad y desesperación que corría por mi cuerpo era tanta que empezó la melancolía, no sabía si ponerme a llorar o tirarme en el suelo y patalear como niña de 5 años, tal vez suene ridículo de mi parte pero este año de verdad esperaba mi tutsibota por lo menos.
Este año aunque me duela aceptarlo me dí cuenta que no existen mas los reyes magos...Entonces para no sentirme tan mensa, me fui de shopping y me regale muchas cosas.Y recibí muchas sorpresas al encontrar la mayoría de las tiendas en rebajas, ¡fue la neta! : )